Tener buenos hábitos de estudio puede ser un poco difícil cuando tantos elementos ajenos a nosotros que están a nuestra disposición o a la mano de nuestros hijos en todo momento, haciendo más difícil el poder concentrarnos.
La pandemia y sus efectos en el estudio
Si a esto le sumamos el hecho de que la pandemia también ha afectado el rendimiento académico de muchos estudiantes: por un lado, haciéndose más notable en las familias con escasos recursos, dado a que no cuentan con las condiciones apropiadas para que los niños tengan un ambiente apto para estudiar.
Mientras que por otro, los que cuentan con recursos y la tecnología, tampoco están supliendo por completo la necesidad real en los niños y estudiantes. Por lo tanto, desde cualquier aspecto, es un tema bastante preocupante.
Y si además tomamos en cuenta el impacto psicológico y social que esta situación ha producido en todos -adultos, adolescentes y niños-, no tenemos un panorama muy favorable para lograr un buen rendimiento en clases.
Precisamente por esto, ahora más que nunca, como padres o simplemente como estudiantes universitarios, debemos tener hábitos que nos ayuden a nosotros o a nuestros hijos a ser mejores estudiantes y hacerle frente a las dificultades.
Buenos hábitos de estudio:
1- Tener un lugar para estudiar
Así como nos tocó improvisar a muchos una oficina en casa, también debemos buscar un lugar especial para estudiar.
Puede que tal vez nuestra casa sea pequeña, pero podemos ser un poco ingeniosos y colocar un pequeño escritorio aéreo en una pared para poder dedicar algunas horas a esta tarea.
Si este lugar no es para ti sino para tus hijos, es importante que busques la manera de que se sientan 100 % cómodos, pues para ellos también ha sido un cambio bastante drástico; primero el hecho de no poder ir a sus clases presenciales y ahora que se puede practicar la alternancia.
No obstante, todavía hay muchos padres que no se sienten preparados para esto, además que no todos los colegios cuentan con los insumos que velen por las normas de bioseguridad. Siendo esto una razón más para preparar un lugar óptimo para el estudio.
2- Establecer un horario:
Si realmente quieres crear un buen hábito de estudio que dé resultados, intenta establecer un horario fijo en el que puedas dedicarte al 100 % a recibir nuevos conocimientos o a reforzar aquellos que estén un poco débiles.
Es súper importante que no superen los 45 minutos para no sobresaturar nuestra capacidad de atención o la de los niños; por lo tanto, debemos combinarlo con actividades que sean más entretenidas y nos ayuden a despertar otras sensaciones que después nos permita regresar al estudio.
3- Conviértelo en una rutina:
Ya tienes el lugar perfecto para estudiar y un horario fijo, ahora falta convertirlo en una rutina para que todos los días tus hijos o tú mismo puedas aprender algo nuevo.
Al principio puede que sea un poco pesado, pero con el tiempo va a ser tan natural que no lo vas a notar ni sentir que es una obligación.
4- Aprovecha los recursos que están a tu mano, pero de manera responsable:
Tal como lo comentamos arriba, ahora hay muchos estímulos a los que estamos expuestos: televisores, celulares, tablet y todo lo que tenga internet, así que es fácil desviar nuestra atención.
Por eso, cuando se trata de estudiar trata de respetar la tecnología y utilizarla solo para adquirir nuevos conocimientos o a modo investigativo, pero no para perder tiempo viendo memes.
Ten en cuenta que en Colombia pasamos un promedio de 9 y 10 horas navegando por internet y gastamos 4 horas TODOS LOS DÍAS en las redes sociales.
¡Imagínate si en vez de gastar todo ese tiempo viendo cosas que no nos nutren lo utilizáramos para leer o estudiar! Sería magnífico, pero como sabemos que es difícil no utilizarlo, por lo menos que se haga de un modo responsable.
5- Planifica:
Sí, hazle una planificación académica para ti o a tus hijos.
Para que esto salga de la mejor manera es importante que al inicio de semana hagas una planificación de las tareas que hay que realizar. Lo importante es priorizar y no querer hacer todo al mismo tiempo.
Empieza desde la tarea más difícil hasta la más sencilla, y así vas sacando el día a día hasta el cierre de la semana.
6- Haz sesiones de estudio por videollamadas:
Esto no solo ayudará tanto a los niños como a uno mismo a sentirnos acompañado, también podría ser bastante útil si queremos compartir nuestro conocimiento o tener un buen feedback sobre un tema.
Por supuesto, es importante respetar este espacio de estudio y no convertirlo en un momento de esparcimiento. Esto podría hacerse al terminar.
7- Utiliza recursos que faciliten el proceso de estudio
Los mapas mentales, banderitas o ultra tabs, separadores o carpetas que tú puedes personalizar, podrían ser de gran utilidad y hacer del estudio un momento más llevadero.
En Pentakits tal vez no podamos ayudarte a fijar esos hábitos de estudio, pero definitivamente tenemos algo que podría facilitar tus tareas:
- Fólderes ultra resistentes para ordenar, clasificar y proteger los apuntes y documentos importantes.
- Separadores para que sepas en qué parte está cada materia.
- Banderitas o ultra tabs que te ayudarán a marcar e identificar ideas importantes.
- Etiquetas adhesivas que te pueden ayudar a organizar y personalizar tus cuadernos.
- Y códigos de color para tu planificación semanal.
Lo mejor es que si quieres puedes personalizar todo con la herramienta de diseño gratuita que Avery tiene para ti, imprimir en tu propia casa y pegarlas o despegarlas de distintos sitios según sea la necesidad.
¿Qué otro tipo de hábitos nos recomiendas? ¡Coméntanos! y si te gustó, compártelo entre tus contactos porque podría ayudarlo.